Entre los plásticos, los que más se encontraron en las playas fueron colillas de cigarrillo (19,6%), fragmentos plásticos (18,7%), envoltorios plásticos como nylon y celofán (13,2%), bolsas plásticas (10%) y restos de nylon (8,1%). En el censo, que se llevó a cabo en 21 localidades bonaerenses entre septiembre y octubre de 2021, participaron 428 voluntarios, que abarcaron una superficie de 422.501 metros cuadrados (42 hectáreas), equivalente a 58 campos de fútbol.
“Estas estadísticas tienen un valor fundamental para entender el comportamiento y el origen de la basura que se encuentran en las playas de nuestras localidades. Para nosotros lo más importante es poder concientizar a la gente de que la mayoría de la basura es generada por nuestros propios desechos y esto requiere un compromiso de todos por un consumo más responsable que evite que estos residuos terminen en nuestras costas afectando, en muchos casos, a nuestra fauna marina”, explicó Karina Álvarez, bióloga y responsable de Conservación de la Fundación Mundo Marino, que fue una de las que participó en el relevamiento.
Las cifras que resultaron del censo provincial son similares a las de un análisis internacional del Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas, que estableció que el plástico representa el 85% de los residuos que llegan a los océanos y advierte que para 2040 los volúmenes casi se triplicarán. De acuerdo con el informe De la contaminación a la solución: una evaluación global de la basura marina y la contaminación por plásticos ,esa situación generaría que existan 50 kilos de plástico por metro cuadrado de costa a nivel global.
Entre los plásticos, los que más se encontraron en las playas fueron colillas de cigarrillo (19,6%), fragmentos plásticos (18,7%), envoltorios plásticos como nylon y celofán (13,2%), bolsas plásticas (10%) y restos de nylon (8,1%).
“Históricamente el 96% de las tortugas verdes (Chelonia mydas) que ingresaron a nuestro centro de rescate presentaron interacción con plástico por ingesta. En el resto de las especies (Laúd y Cabezona) se ha encontrado también plástico pero no en porcentaje alarmante”, señaló Álvarez, que fue además una de las autoras de un estudio publicado en septiembre en la revista internacional Frontiers, que analiza cómo distintas especies del Estuario del Río de la Plata funcionan como indicadores biológicos de la interacción negativa con plásticos.
«Una especie que funciona como indicador de esa interacción negativa con el plástico nos habla de los cambios (en este caso, negativos) que afectan a todo el ecosistema del Estuario del Río de La Plata. También nos permite tener una línea de base de información y realizar un seguimiento combinando distintas especies para evaluar tendencias, es decir, si la situación empeora o no», apuntó Pablo Denuncio, doctor en Biología, docente de la Universidad Nacional de Mar del Plata e investigador del CONICET, quien también es coautor de la investigación.
De acuerdo con el trabajo de estos investigadores, de 62 estudios analizados se concluyó que 47 especies carismáticas marinas interactuaron con plástico en el Estuario del Río de La Plata. Además, las aves marinas son las que más reportes de interacción mostraron (67,5%), seguidas por las tortugas marinas (20%) y por mamíferos marinos (12,5%). La mayoría de los reportes de interacción con plástico se concentraron en el sur de Brasil. En los 3 casos de especies, el tipo de plástico ingerido es de origen urbano (tortugas 65,4%, mamíferos 53,3% y aves marinas 58,8%, respectivamente).