Las quemas de pastizales en las Islas del Delta del Paraná son un problema frecuente en la zona. Pero en las últimas semanas, debido a la sequía y a una bajante extraordinaria del río Paraná, el fuego se expandió con tal gravedad que se calcula que, hasta el momento, alcanzó nada menos que 90 mil hectáreas, provocando grandes daños en la zona de humedales.
Los humedales son ecosistemas que cumplen un rol fundamental, ya que absorben agua de lluvia a través de plantas hidrófilas, que la almacenan y liberan lentamente. Esta tarea es esencial para regular las inundaciones y la provisión de agua potable. Y además, en el caso del Delta, alberga 700 especies de vegetales, más de 540 especies de vertebrados y 260 de aves.
Según Fernando Miñarro, Director de Conservación de la Fundación Vida Silvestres, “los daños ocasionados por los incendios se van a ver con el tiempo. Pero, dada la situación agravante, el fuego se expandió por áreas en las que en condiciones normales no hubiera ingresado. Esto va a tener consecuencias importantes para la fauna, la microflora, los animales que son corridos por los propios incendios. El impacto y la recuperación que pueda tener en la naturaleza lo veremos más adelante”.
¿Cuáles son los orígenes del fuego?
Miñarro explica que los humedales suelen tener distintos disturbios naturales. El más frecuente es el agua, aunque hay especialistas que sostienen que el fuego también puede generarse de manera natural cuando hay sequía. Pero más allá de estas cuestiones, en la zona del Delta suelen realizarse quemas de pastizales para realizar actividades ganaderas.
Los humedales son ecosistemas que cumplen un rol fundamental, ya que absorben agua de lluvia a través de plantas hidrófilas, que la almacenan y liberan lentamente. Esta tarea es esencial para regular las inundaciones y la provisión de agua potable.
“Históricamente el fuego se ha utilizado como una herramienta de manejo para eliminar a los pastos secos, que no sirven como alimento para el ganado. Si uno los quema, el rebrote es tierno, pero en caso de realizarse, se tiene que hacer en condiciones muy controladas. No se tendría que haber hecho en época de sequía”, señala Miñarro y explica que los humedales suelen verse afectados por el avance de la urbanización y de la producción que reemplaza estos ecosistemas naturales para llevar a cabo actividades forestales o agropecuarias.
La importancia de la Ley de humedales y el ordenamiento ambiental del territorio
A la hora de hablar de una solución o una manera de revertir parte del daño que los incendios están generando a nivel ambiental, Miñarro sostiene que es necesaria la sanción de la Ley de Humedales, para localizar estos ecosistemas en nuestro país, conocer su cantidad y crear acciones para su manejo y uso sustentable. Pero para que realmente se pueda lograr un cambio importante, es indispensable que se pongan en práctica políticas de estado ambientales.
“El ordenamiento ambiental del territorio implica regular el uso del territorio de un país, donde la escala del paisaje es clave, porque no hay que ver una laguna de manera individual, sino ver todo el paisaje: qué actividades hay alrededor, con qué otros ecosistemas se vinculan. La Ley de humedales tiene que ser una pieza de un rompecabezas más grande, que va a permitir tener una mirada más integral del territorio”, manifiesta el especialista.
¿Qué podemos hacer los ciudadanos comunes?
“Tenemos una sociedad muy urbana, cada vez más alejada de la naturaleza y, por lo general, se preocupa poco de los temas ambientales y empieza a involucrarse cuando los problemas superan las barreras de los ambientes rurales y llegan a la ciudad”, indica Miñarro y recalca que todos los individuos tenemos la responsabilidad de cuidar el ambiente cada vez que estamos en contacto con la naturaleza o haciendo nuestra actividad productiva.
Algo para destacar es que a nivel mundial, cada vez más personas se involucran en los temas ambientales, buscando un mundo mejor. La clave es trabajar para generar y hacer llegar a las nuevas generaciones información de calidad para poder ver cambios positivos lo antes posible.