Veo Veo en Buenos Aires ofrece un registro detallado de la fauna y la flora que se encuentra en jardines, calles, reservas y parques porteños. La investigación y las ilustraciones pertenecen al artista y naturalista Marcelo Canevari que trabajó con sus hijos Miguel y Marcelo, y con la museógrafa Nélida Lascano González.
Jacarandás, tipas, orquídeas del talar y vinagrillos; cigarras y mariposas espejito; cotorras, comadrejas y tortugas pintadas; gallaretas, garzas, lagartos, caburés y murciélagos habitan una de las ciudades más grandes y ruidosas del mundo: Buenos Aires.
El título del libro, que alude al juego infantil veoveo, destaca la importancia de descubrir y conocer mejor el entorno en el que vivimos. Se trata de un libro para no iniciados en la observación de la naturaleza, para incentivar a conocer más sobre la riqueza que nos rodea en la ciudad.
Canevari padre tiene una amplia trayectoria y conocimiento de la naturaleza de la Argentina a partir de sus trabajos en el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia y en la Administración de Parques Nacionales, y en la edición de guías de campo y otras obras de divulgación, como Nueva guía de las aves argentinas y Cien mamíferos argentinos (en colaboración con Carlos Fernández Balboa). En sus obras, el arte y la ciencia se unen en defensa de la naturaleza.
Se trata de un libro para no iniciados en la observación de la naturaleza, para incentivar a conocer más sobre la riqueza que nos rodea en la ciudad.
En Veo Veo en Buenos Aires se presentan dibujos y explicaciones didácticas sobre el avifauna, las especies animales y vegetales y los insectos con los que convivimos a diario en la ciudad de Buenos Aires y en la región metropolitana. “Se acerca a los lectores al entorno cotidiano con el propósito de despertar la preocupación por protegerlo y conservarlo”, señala el editor.
Los textos son entretenidos además de informativos: “Buenos Aires ofrece permanentes sorpresas: calles arboladas que en primavera se visten de increíbles colores, bandadas de loros que vuelan entre departamentos, el vibrante sonido de sierra que emiten las cigarras en las tardes calurosas del verano y muchísimas sorpresas más. Andá con los sentidos atentos”, se recomienda en las primeras páginas.
Recomendado para lectores de cualquier edad que amen la naturaleza y el arte del dibujo.