El REN21 mide la utilización de energía renovable en ciudades para combatir las emisiones y prevenir la polución y el cambio climático, al tiempo que hace un balance de los esfuerzos de transición a energías renovables de las ciudades en todo el planeta.
Las energías renovables están transformando el Barrio Mugica (Villa 31). Gracias a la instalación de paneles solares, los vecinos están accediendo a la energía de manera más limpia y económica. Además, tienen la oportunidad de capacitarse para trabajar en este sector. «No solo necesitamos la transición a las energías renovables para combatir al cambio climático, sino que también es necesaria para generar desarrollo local y combatir la pobreza”, dice Lea Ranalder, project manager de REN21.
El Barrio Mugica es uno de los principales asentamientos informales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con una población de más de 40.000 habitantes. La Secretaría de Integración Social y Urbana, creada a fines del 2015, tiene la misión de integrar este barrio a la ciudad formal. Como no todas las viviendas del barrio pueden ser mejoradas, en particular, las que se ubicaban debajo de la Autopista Illia, por sus inadecuadas condiciones de habitabilidad, exposición a contaminación y por el peligro que representa vivir debajo de la autopista, las familias que allí vivían tuvieron que ser reubicadas. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires trabajó en la construcción de viviendas en dos predios: Containera -en el sector Cristo Obrero del barrio- y en un predio que anteriormente perteneció a YPF, lindero a la Av. Ramón Castillo.
Con 26 paneles solares por cada núcleo de viviendas, los nuevos edificios generan una potencia por vivienda entre 1.300 y 1.700 kWh anuales, correspondientes al 20-25% del consumo de una vivienda tipo.
En Containera se construyeron 108 nuevas unidades funcionales en cinco edificios de cuatro plantas. Los mismos fueron construidos utilizando materiales que garantizan un alto nivel de aislación térmica e incorporan calentamiento de agua por energía solar térmica y también generación eléctrica con energía solar fotovoltaica.
Con 26 paneles solares por cada núcleo de viviendas, los nuevos edificios generan una potencia por vivienda entre 1.300 y 1.700 kWh anuales, correspondientes al 20-25% del consumo de una vivienda tipo. A su vez, parte de las viviendas cuentan con bombeo fotovoltaico, alimentando las bombas elevadoras de agua por medio de un sistema de paneles solares independientes. Todas las obras de vivienda en Containera fueron concluidas en julio del 2018 y las familias ya completaron sus mudanzas.
Luego del primer proceso de reasentamiento en Containera, se trabajó en la construcción de 1.044 viviendas en otro predio en el sector norte del barrio, distribuidos en 26 edificios de tres y cuatro plantas, con departamentos que varían desde los dos hasta los cinco ambientes. En términos de construcción, estos edificios son similares a los de Containera, con la utilización de Steel Frame en muros exteriores de la envolvente, aislación térmica, y ladrillos de hormigón en los interiores, que suman inercia térmica. A su vez, también incluyen tecnología para el aprovechamiento de energías renovables, como los 3.408 módulos fotovoltaicos, de 72 celdas, con 330 Wp de potencia cada uno. Esto otorga a las viviendas una potencia total de 1.12 MW fotovoltaicos (1.1 kWp por unidad funcional). Además, las mismas cuentan con 515 termotanques solares compactos, termosifónicos y atmosféricos de 300 litros cada uno.
La instalación fotovoltaica de las nuevas viviendas en YPF, vista en su conjunto, hace que éstas conformen el parque solar más grande de la Ciudad de Buenos Aires. Al día de hoy más de 950 familias ya están viviendo en sus nuevos hogares.
Nota publicada por Florencia Tuchin en Redacción