El desarrollo de vehículos eléctricos en la Argentina va mostrando sus primeros brotes. Fruto de esta germinación nació el TITO, el primer auto eléctrico fabricado en la provincia de San Luis.
Lejos de las mega inversiones, infraestructuras y capacidad de acción y operación de las grandes automotrices, en nuestro país existen tres empresas dedicadas al desarrollo de autos 100% eléctricos.
La primera en presentarse en público fue Volt Motors, la compañía cordobesa que en 2018 exhibió dos de los tres modelos que comenzó a fabricar recién en agosto de 2020.
A su vez, Sero Electric fue la segunda en salir a escena. Sin embargo fue la primera firma argentina en fabricar sus vehículos 100% eléctricos.
En el segundo semestre de 2019 la empresa inició la producción de sus tres modelos (un citycar y dos utilitarios pequeños) en su planta de Morón, provincia de Buenos Aires, donde posee una capacidad de producción de 50 unidades mensuales.
La tercera en cuestión es Coradir, una reconocida empresa metal-mecánica de San Luis que a partir de julio de este año comenzará a fabricar su modelo llamado TITO, un citadino del cual se acaba de lanzar la segunda preventa a un valor de US$ 13.300.
Para este desafío la compañía ha invertido 1,5 millones de dólares que generarán 40 nuevos puestos de trabajo dedicados exclusivamente a la línea de producción en su planta de San Luis.
«Desde que se conoció nuestro prototipo, la respuesta del público fue asombrosa. Para el primer lote de preventa, realizado a fines de 2020, hemos recibido 113 reservas», comentó a Clarín Juan Manuel Baretto, presidente de Coradir.
El auto eléctrico puntano se destaca por ser el primero en su clase con capacidad para cuatro ocupantes, podrá alcanzar una velocidad máxima de 65 km/h. y está alimentado por baterías de litio con una autonomía de 100 kilómetros.
En aquella oportunidad el TITO había sido ofrecido a un precio promocional de 10.000 dólares que lo convertía en el auto eléctrico más barato del mercado.
Si bien TITO sigue siendo el citycar eléctrico más económico, tanto Sero Electric como Volt Motors cuentan con otras variantes que arrancan desde $1.000.000.
El auto eléctrico puntano se destaca por ser el primero en su clase con capacidad para cuatro ocupantes. Mide 2,83 metros de largo, 1,50 de ancho y 1,56 de alto.
De todos modos, las plazas traseras están pensadas para niños o personas de contextura chica. Con esta configuración, la capacidad de carga del baúl es practicamente nula, pero en caso de no usarse los asientos traseros podrán rebatirse para ampliar su volumen.
A diferencia de Volt Motors y Sero Electric, Coradir ofrece un solo modelo equipado con un motor de 4,5 kW (equivalentes a 60 caballos de fuerza), asociado a una selectora automática, que le permite alcanzar una velocidad máxima de 65 km/h. La tracción es trasera.
El sistema está alimentado por un paquete de baterías de litio de desarrollo local, que le permite alcanzar una autonomía de 100 kilómetros.
El proceso de recarga completo lleva entre 6 y 8 horas, directamente desde un toma corriente convencional de 220 volts. Las baterías son de 8 kWh y tienen una vida útil de 2.000 ciclos de carga. Esto significa que la batería se descarga y recarga al 100% 2000 veces.
«La idea es que ningún usuario tenga que hacer una instalación eléctrica especial ni gastar de más en cargadores específicos. El TITO podrá cargarse igual que un teléfono celular», destacó Baretto.
El directivo agregó que «hay que tener en cuenta que no siempre será necesario recargarlo al máximo. Por ejemplo, si se desea realizar un trayecto de pocos kilómetros bastará con dejarlo enchufado mucho menos tiempo».
El vehículo desarrollado por Coradir está montado sobre un chasis autoportante de origen chino, que es utilizado por más de 20 marcas.
Y si bien al principio tanto el chasis como los paneles de la carrocería llegan importados, el objetivo de la compañía es desarrollarlos en el país en un corto plazo.
Como todo vehículo eléctrico, una de las bondades del TITO es que no requiere mantenimiento de motor (cambio de fluidos y filtros), solo de frenos, amortiguadores y neumáticos.
En cuanto al equipamiento, ofrece levantavidrios eléctricos, cierre centralizado con comando a distancia, sistema multimedia con pantalla táctil de 10″, bluetooth, y cámara de visión trasera, entre otros. Sin embargo, hay que destacar que no cuenta con airbags ni aire acondicionado.
Un dato no menor es que la empresa puntana aún espera la aprobación de la Licencia de Configuración de Modelo (LCM) que la habilita a fabricar, homologar y vender vehículos dentro del territorio argentino.
Con información de Clarin