El 9 de abril de 1985 la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó las Directrices de Naciones Unidas para la Protección de los Consumidores, que elevó los derechos de los consumidores a una posición de reconocimiento y legitimidad internacional. Desde entonces, se celebra con diferentes actos y actividades que involucran tanto a mayores como a pequeños.
El consumo responsable es el duodécimo de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que adoptaron el 25 de septiembre de 2015 los líderes mundiales y la ONU para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos. Estos objetivos forman parte de la agenda de desarrollo sostenible. Cada objetivo tiene metas específicas que deben alcanzarse para el año 2030.
Los objetivos consisten en fomentar el uso eficiente de los recursos y la eficiencia energética, infraestructuras sostenibles y facilitar el acceso a los servicios básicos, empleos ecológicos y decentes, y una mejor calidad de vida para todos. Su aplicación ayuda a lograr los planes generales de desarrollo, reducir los futuros costes económicos, ambientales y sociales, aumentar la competitividad económica y reducir la pobreza.
El consumo responsable es el duodécimo de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que adoptaron el 25 de septiembre de 2015 los líderes mundiales y la ONU para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos.
¿Por qué es un objetivo de Desarrollo Sostenible?
Las cifras aportadas por la ONU bastan para comprender la importancia y lo necesario del consumo responsable:
- Se calcula que cada año se tira alrededor de una tercera parte de los alimentos producidos.
- La población mundial podría llegar a los 9.600 millones de personas en 2050. Para poder proporcionar los recursos naturales necesarios para mantener el ritmo de vida actual harían falta casi 3 planetas Tierra.
- Menos del 3 % del agua del planeta es potable, de la cual el 2,5 % está congelada en la Antártida, el Ártico y los glaciares. Por lo tanto, la humanidad cuenta solo con el 0,5 % para satisfacer todas las necesidades de agua dulce de los ecosistemas y del hombre.
- El uso de energía en los países de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) seguirá creciendo. El uso de energía comercial y residencial es el segundo sector de consumo energético mundial que más rápido está creciendo, después del transporte.
- En 2002, el total de vehículos automotores en los países de la OCDE era de 550 millones. Para esta fecha ya se prevía un aumento del 32 % en la cantidad.
- Los hogares consumen el 29 % de la energía mundial y, en consecuencia, contribuyen al 21 % de las emisiones de CO2 resultante.