El plenario de comisiones de Ambiente, Agricultura y Presupuesto y Hacienda emitió dos dictámenes favorables a la Ley de Humedales. Lo curioso de la jornada fue que los sectores del oficialismo que impulsan la ley de humedales sufrieron hoy un revés político ya que Juntos por el Cambio logró unificar una posición y se quedó con el dictamen de mayoría. Constreñido por la falta de apoyo de los gobernadores, el Frente de Todos y sus aliados firmaron un texto propio en minoría.
Tal como se preveía, los mandatarios provinciales hicieron sentir su peso y varios diputados oficialistas se ausentaron o decidieron no acompañar el proyecto impulsado por Leonardo Grosso, presidente de Recursos Naturales. Los diputados del Frente de Todos Daniel Brue y Nilda Moyano, de Santiago del Estero; Pamela Calletti, de Salta; Sergio Casas, de La Rioja; Silvana Ginocchio y Anahí Costa, de Catamarca; María Parola y Nelly Daldovo, de Formosa; y Liliana Paponet, de Mendoza, no votaron con el resto de la bancada.
Otra particularidad de la jornada fue la presencia de Juntos por el Cambio, a diferencia de la semana pasada cuando desconocieron la reunión. Esta vez, el titular de Agricultura, Ricardo Buryaile (UCR), reconoció la validez de la convocatoria y se sumó el interbloque opositor.
Maximiliano Ferraro, diputado de la Coalición Cívica, anunció que Juntos por el Cambio iba a presentar su propio dictamen, distinto al que impulsa Grosso, con el Frente de Todos. «El dictamen es fruto de un esfuerzo por armonizar miradas y observaciones», defendió Ferraro y remarcó: «Entendemos que sí estamos dispuestos a este debate. Hoy tenemos un acto de madurez política».
“Pretendimos buscar un equilibrio lógico. Nuestro dictamen fija los lineamientos para encauzar las tensiones que todos debemos reconocer inherentes a la gestión de los territorios”. Maximiliano Ferraro.
«Cuidar el agua implica preservar las condiciones para una Argentina más próspera que resguarde los medios de vida de los habitantes y las posibilidades de un futuro», señaló al presentar el proyecto que también «cuida la producción».
El dictamen que el oficialismo impulsó está inspirado en el que se firmó en 2020 en acuerdo con la comunidad científica, organizaciones socioambientales y otros sectores. Sin embargo, se le hizo varias modificaciones para sumar la adhesión de algunos de los diputados de las provincias mineras.
Esto despertó la advertencia de los diputados de Izquierda, quienes entienden que «podría hacer ciertas licencias que beneficien a las mineras y perjudiquen al ambiente».
Tras las firmas de los dictámenes, los proyectos quedaron listos para ser debatidos en el recinto. La prórroga por decreto de las sesiones ordinarias juega a favor de quienes impulsan la ley ya que el margen de tiempo se amplía hasta fines de diciembre. Sin embargo, el panorama es incierto.
“Con los firmantes de los dos dictámenes tenemos más de la mitad más uno en la Cámara de Diputados, solo tenemos que resolver las diferencias, el articulado, el ‘finito’. Esperemos que la semana que viene vayamos a discutir la ley de humedales para darle media sanción”, presionó Grosso al cerrar el plenario.
“Con los firmantes de los dos dictámenes tenemos más de la mitad más uno en la Cámara de Diputados, solo tenemos que resolver las diferencias, el articulado, el ‘finito’». Grosso.
El radical Ricardo Buryaile, titular de Agricultura, adelantó que la oposición planea “escuchar a los que no están”, en referencia a las provincias del norte y cuyo.
En términos generales, el proyecto consensuado por Juntos por el Cambio reconoce una mayor incidencia de las provincias, ya que, por ejemplo, para la elaboración del inventario de humedales toma la información que hayan generado cada distrito y CABA. Por otro lado, la autoridad de aplicación de la norma serán los Ministerios de Ambiente y Agricultura, de forma conjunta.
En la bancada oficialista reconocieron que la definición de qué es un humedal que quedó plasmada en el dictamen de mayoría “no es tan diferente” a la propuesta por el oficialismo, por lo que no descartaban continuar negociando para alcanzar los consensos mínimos.