Cada dos segundos en Argentina se produce una tonelada de basura. Gran parte de ella termina en rellenos sanitarios o en basurales que se encuentran al borde del colapso. Uno de los mayores problemas sanitarios que tiene la provincia de Buenos Aires es el de los basurales a cielo abierto. Para dar solución y procesar la gran cantidad de toneladas de residuos que se producen a diario se presentó una nueva maquinaria que permite procesar de 90 a 100 toneladas diarias de residuos. Además, permitirá reducir los residuos sólidos urbanos hasta un 30% en peso y un 75% en volumen, para su posterior reciclado y reuso.
El gobernador Axel Kicillof participó junto al intendente Diego Nanni de la presentación que forma parte del programa de Gestión de Residuos Domiciliarios de Exaltación de la Cruz. Su puesta en marcha será acompañada por un plan de separación diferenciada de residuos en origen que involucrará a los vecinos en el proceso. El Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible (OPDS) se encuentra asesorando al municipio para adecuar el proyecto a los requerimientos ambientales vigentes.
La maquinaria, fabricada por la empresa Hábitat Sustentable en el Parque Industrial de Pilar, procesa los residuos elevando la temperatura. De esa forma se eliminan las bacterias que agreden al medioambiente sin quemar combustibles ni agregar productos químicos. El residuo tratado no tiene olor y reduce un 70% el volumen inicial. El material resultante es un inerte y se está probando su reutilización en forma de bloques de hormigón o bases para calles.
La maquinaria procesa los residuos elevando la temperatura. De esa forma se eliminan las bacterias que agreden al medioambiente sin quemar combustibles ni agregar productos químicos.
Según datos oficiales, el 49% de los residuos que eliminamos en Argentina son orgánicos, el 15% son plásticos, el 14% papel y cartón. Cada habitante produce, en promedio 1,03 kilos de residuos que hacen un total de 45.000 toneladas diarias de residuos sólidos urbanos en el país. Semejantes cifras indican la necesidad urgente de un cambio cultural con nuevos hábitos de consumo que reduzcan la generación de residuos y propicie la posterior separación para reciclado y reutilización.